El sábado pasado un evento sin precedentes sacudió la ciudad: fuimos atacados por zombies hambrientos... de alimentos no perecederos:
Un cerebro fresco sí es perecedero pero ella no lo sabía
Cada año por éstas fechas los muertos se levantan de sus tumbas para recolectar comida para los necesitados lo cual se me hace una idea muy cool. O sea, si tu sueño es alguna vez convertirte en zombie, donas algunas latillas y te unes a la horda de resucitados por un día. Así de fácil.
¿Muy yo, no? Así, me lancé a cazar zombies armada con mi cámara, un marido, una carreola y 2 pequeños monstruos esperando no convertirme en uno de ellos, al menos no este año. Primero había que tantear el terreno y ver qué rollo, así ya con conocimiento de causa el 2010 seguro sí me uno. Algunas fotos más:
...Pero el ejército consideró que no